Otoño

Has abandonado el calor del verano
Ante tu mirada se ve los inicios de la vejez.
Tu piel, labios y ojos, son los de un anciano
Ha llegado el tiempo donde hablará el juez

La justicia, la muerte y la templanza
Son las figuras que aparecen en las estrellas
Es la hora de la reflexión, es hora de la añoranza
Pues ahora sólo queda la alegría en huellas.

Las hojas te acompañan en tu muerte lenta
Son aquellas que pintas de color ocre
Para que después duerman en la tierra
Para que mueran en las ilusiones

Bostezas lentamente, mientras el color se escapa
Entre tus dedos
Recordarás mejores tiempos,
Y esperaras la blanca capa

Es el otoño quien se viste de hojas muertas
Señor que cae en un sueño
Lento y de muerte, que no desespera
Sino que calma, por qué él mismo es su dueño