jueves, 18 de agosto de 2011

Optimismo


Por la calle, una guerra en proceso, casas en ruinas, algunas personas yacen muertas. El sonido de los cañones retumba en la ciudad. Los ladrones hurtan cínicamente, y sobre el horizonte, la erupción de un volcán.

- Es un castigo divino – Escuchó de un amigo.

- Yo soy un hombre de razón – contestó altanero, levantando una ceja.

En las noches, cuando está solo, se hinca junto a la cama y ora: “Este es el mejor de los mundos posibles, este es el mejor…”