viernes, 30 de octubre de 2015

Fuego fatuo



Sin transcursos calmados
procede el viajero inerme.
Maltrecho el sendero cansado
trata de esquivar al durmiente.

Sonríe el horizonte y oscila
antes de menguar. Reposa el polvo
y el cielo cinericio exhala favila.
Él salta las frigentes vías al fondo.

Lejos y leve radioso el fuego fatuo.
Lo detienen sus entrañas maznadas,
El baile verde ígneo le es arduo.
Avanza y disminuye las miradas.

Son trampas para alejarlo del pical.
El canto pírico lo seduce.
Sin mástil y cuerdas cae al esteral.

No hay lugares para el encuentro

Do ha quedado ahora el fuego fatuo

Titanes



Los titanes aún deambulan por la tierra. Ahora entiendo cómo un titan -en este caso un huracán categoría 5- se torna mito.

Cosmófagos



Somos cosmófagos y teófagos:
"La misa no sólo es una actualización o representación de la Pasión de Jesucristo; es también una liturgia, un misterio en donde el diálogo ente el hombre y su Creador culmina en la comunión. Si mediante el bautismo los hijos de Adán adquieren esa libertad que les permite dar el salto mortal entre el estado natural y el estado de gracia, por la comunión los cristianos pueden, en las tinieblas de un misterio inefable, comer la carne y beber la sangre de su Dios. Esto es alimentarse con una substancia divina, con la substancia divina.
Paz, Octavio. 1974. "Poesía de comunión y poesía de soledad" en Las peras del olmo.

Envidia


Salió el monstruo de los ojos verdes. Se puso lentes oscuros para cubrir el brillo.

martes, 6 de octubre de 2015

Repetición


Del techo los ecos susurran: veinte corazones.
¿Serán las sienes llamando al pecho?
La música roja se ha disuelto
dejando una orquesta silenciosa.

Sócrates blanco

Algún día me robaron un beso al atravesar Sócrates blanco.