Pareciera que un nuevo término se esta formando: Emofobía. Vaya locura.
Nuevamente la ignorancia y la intolerancia se han hecho presentes en nuestro país. Personas con argumentos huecos y sin peso, se han dejado llevar por sus emociones más básicas y se han levantado en contra de las personas denominadas Emos.
Primero fue en Querétaro, la convocatoria fue por correo de forma anónima. Claro esta, la primera cobardía de los presuntos valientes que desean erradicar a la tribu emo. Muy “machitos” para salir a las calles asumiendo la total creencia de que es un grupo despreciable, andrógino, deprimente y más, pero con la misma, se andan escondiendo detrás del anonimato que proporciona el Internet. En segundo lugar, sus argumentos expresados son de flojera, totalmente sin sentido, y falta de lógica. Unas cuantas entrevistas a jóvenes integrantes de estos movimientos, respondieron a la pregunta ¿Por qué agraden a los Emos?, ufanamente respondieron: “Se adueñan de alguna parte del parque, están por todos lados, además, algunos hombres emos, parecen niñas”. Válgame tal barbaridad, me imagino a estos muchachos pidiendo trabajo. Los emos no son perritos que marcan su territorio, no ponen alambres de púas cuando están en alguna parte de un parque. Los metaleros, punketos y más tribus intolerantes les carcome la idea de ver a un hombre con rasgos femeninos, o indefinidos. Añadiendo a sus argumentos, que la originalidad es única de un grupo, que los derechos de autor en tendencias es una máxima universal, inviolable, y aquel que ose imitar alguna parte de esas características, que han asumido ellos, debe ser reprendido con golpes.
Anteriormente, eran los homosexuales los atacados, los trogloditas heteronormativistas señalaban con desprecio, con asco y repudio a la gente gay, cual fue su sorpresa que cada vez más se ven personas gays caminando por la calle, sin temor a ser amenazados, señalados o marginados.
La denuncia esta en el aire, la intolerancia no lleva a nada, sólo a un circo, del cual se alimenta la gente idiota, sin nada más que hacer. ¿Dónde se encuentra la Iglesia repudiando los hechos de agresividad contra los emos, dónde? Un silencio, el cual se romperá, pues así como hay grupos intolerantes, habrá gente que no se dejará vencer.
Nuevamente la ignorancia y la intolerancia se han hecho presentes en nuestro país. Personas con argumentos huecos y sin peso, se han dejado llevar por sus emociones más básicas y se han levantado en contra de las personas denominadas Emos.
Primero fue en Querétaro, la convocatoria fue por correo de forma anónima. Claro esta, la primera cobardía de los presuntos valientes que desean erradicar a la tribu emo. Muy “machitos” para salir a las calles asumiendo la total creencia de que es un grupo despreciable, andrógino, deprimente y más, pero con la misma, se andan escondiendo detrás del anonimato que proporciona el Internet. En segundo lugar, sus argumentos expresados son de flojera, totalmente sin sentido, y falta de lógica. Unas cuantas entrevistas a jóvenes integrantes de estos movimientos, respondieron a la pregunta ¿Por qué agraden a los Emos?, ufanamente respondieron: “Se adueñan de alguna parte del parque, están por todos lados, además, algunos hombres emos, parecen niñas”. Válgame tal barbaridad, me imagino a estos muchachos pidiendo trabajo. Los emos no son perritos que marcan su territorio, no ponen alambres de púas cuando están en alguna parte de un parque. Los metaleros, punketos y más tribus intolerantes les carcome la idea de ver a un hombre con rasgos femeninos, o indefinidos. Añadiendo a sus argumentos, que la originalidad es única de un grupo, que los derechos de autor en tendencias es una máxima universal, inviolable, y aquel que ose imitar alguna parte de esas características, que han asumido ellos, debe ser reprendido con golpes.
Anteriormente, eran los homosexuales los atacados, los trogloditas heteronormativistas señalaban con desprecio, con asco y repudio a la gente gay, cual fue su sorpresa que cada vez más se ven personas gays caminando por la calle, sin temor a ser amenazados, señalados o marginados.
La denuncia esta en el aire, la intolerancia no lleva a nada, sólo a un circo, del cual se alimenta la gente idiota, sin nada más que hacer. ¿Dónde se encuentra la Iglesia repudiando los hechos de agresividad contra los emos, dónde? Un silencio, el cual se romperá, pues así como hay grupos intolerantes, habrá gente que no se dejará vencer.
1 comentario:
DAVID, Y PENSAR QUE LA CULPA DE TODO ESTO ES EL MIEDO, MIEDO QUE SURGE DE LA IGNORANCIA, QUE VIENE DE LA INCAPACIDAD -O FALTA DE VOLUNTAD- DE UN GOBIERNO POR EDUCAR A SU PUEBLO... ¿QUÉ SE LE HACE SINO RESISTIR Y ATACAR CON INTELIGENCIA? NUESTRO EMO, ENTIENDE LO QUE DEBE HACER. UN ABRAZO.
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