Una partícula que estremeció su mundo hace tiempo. Soberbio,
simplemente soberbio. Recordó el miedo que le provocó dicha partícula que entró
en lo “impenetrable” y en lo soberbio.
¡Que muera narciso!
“¡Deprisa! No hay tiempo”.
Más bien se acelera con la expansión
de un universo que no vemos en su extensión,
sólo llegamos a pensar que no hay tiempo.
Cada paso, es movimiento en el espacio.
º
Cada paso, es progreso en el tiempo.
Melodía que no comprendo pero disfruto,
siempre buscando más calma en el infortunio.
“¡Una pausa! ¡Qué el tiempo se detenga!”.